¿Qué objetivo comprar?

Cuando compraste tu primera cámara fotográfica incluía un objetivo zum polivalente. Te ha resuelto muchas situaciones, pero a medida que vas aprendiendo, crees que necesitas incorporar uno mejor. Aquí surge la duda ¿Qué objetivo comprar?

Un equipo que incluya todas las distancias focales desde 24 mm hasta 135 mm, aproximadamente, resulta más que suficiente para abarcar la mayoría de situaciones habituales. Puedes tomar desde paisajes hasta retratos. Incluso captar sujetos relativamente lejanos. Existen, sin embargo, otras medidas u objetivos especiales que pueden resultar de gran utilidad para trabajos específicos, tales como teleobjetivos largos para fotografía deportiva o de naturaleza, macros de acercamiento o angulares extremos para arquitectura o paisajes.

¿Fijo o zum?

La primera duda surge al plantearte si debes optar por un objetivo fijo o uno de distancia focal variable. Si bien los objetivos de distancia focal fija ofrecen los mejores resultados de calidad –y por regla general, la mejor relación calidad/precio– casi todos los fabricantes incluyen en sus catálogos objetivos zum que aportan mayor versatilidad y comodidad.

Éstos tienen la ventaja tener que cambiar con menos frecuencia de objetivo con lo que se gana en rapidez y protección del interior de la cámara contra indeseables partículas que se pueden adherir al sensor cada vez que cambiamos los objetivos. A cambio perdemos luminosidad y, con frecuencia, calidad.

En caso de optar por objetivos zum recomendamos elegir los que tienen el mismo valor de luminosidad máxima con independencia de la distancia focal elegida y aquellos cuyo rango no supera tres veces la distancia mínima de la máxima. Es decir, procura evitar los de rango excesivamente amplio.

¿Qué necesito?

La óptica determina la calidad de las imágenes mucho más que la cámara. Además, los objetivos buenos son caros. Por eso, resulta preferible invertir el dinero (casi siempre escaso) en pocos objetivos buenos mejor que en muchos regulares. Por eso, llegado el momento de adquirir una nueva óptica, hay que plantearse en primer lugar la necesidad real de la misma y el uso al que va a ir destinada.

Piensa qué tipo de fotografía te gusta más. Si estás empezando, probablemente no lo sepas aún. Quizá sea una buena razón para esperar a cambiar de objetivo. También puedes revisar tu archivo para ver qué tipo de imágenes predominan. Si eres más de paisajes, quizá debas invertir en un angular. Si más de retratos, un tele corto. Y si te gusta la acción y naturaleza, un tele largo. Si lo tuyo son los reportajes y escenas variadas, sigue con el zum polivalente, similar al del kit, pero invierte en uno bueno.

Cuando nos iniciamos en la fotografía siempre queremos más objetivos –casi todos los neófitos creen necesitar un tele–. En realidad, el zum de kit resuelve casi todas las situaciones porque abarca desde un gran angular hasta un tele corto, óptimo para retratos. Sin olvidar que, con frecuencia, el mejor zum se consigue con las piernas en vez de con la muñeca. Es decir, si necesitas estar más cerca del sujeto, camina hacia él.

Tipos de objetivos

A lo largo de esta entrada hemos hablado varias veces de distintos tipos de objetivos. Vamos profundizar un poco más en ello. En la próxima entrada desgranaremos las características de cada tipo en función de su ángulo de visión.

Angulares

Con un campo visual entre los 60° y los 90°. Si se amplía el ángulo de visión se pueden denominar angulares extremos u ojos de pez cuando se aproximan a los 180°.

Normales

Con ángulo de visión en torno a los 45°. Se llaman así porque este ángulo equivale al de la visión humana. Este dato se obtiene de la medida de la diagonal del sensor. Si tomamos como ejemplo una cámara con un sensor del tamaño del negativo –24×36 mm– cuya diagonal mide 45 mm, para acercarnos a la visión humana necesitaríamos un objetivo con una distancia focal de 45 mm. Por la misma razón, si utilizáramos una cámara de medio formato cuyo sensor tuviera una diagonal de 85 mm, necesitaríamos un objetivo con una distancia focal de 85 mm para lograr el ángulo de visión humana.

Teleobjetivos

Tienen un ángulo de visión muy cerrado, por debajo de los 25º.